Cáterin Paola Contreras Daza; una madre de familia de 36 años de edad y residente en el corregimiento de Conejo, zona rural del municipio de Fonseca, se encuentra devastada después de ser falsamente acusada por la Policía de un robo en la reconocida tienda Olímpica de la localidad en mención.
La situación, que comenzó como un malentendido, ha dejado a Cáterin luchando por limpiar su nombre del acoso generado por la incorrecta información policial, ya que el ambiente para ella tomó un giro aún más doloroso cuando una de sus hijas, fue objeto de burlas y bullying por parte de un amiguito. “Mis hijas están sufriendo por algo que no hice. Esto ha manchado nuestra reputación y ha afectado profundamente a nuestra familia”, expresó visiblemente afectada.
Para Cáterin la pesadilla comenzó cuando agentes de Policía la abordaron erróneamente dentro de la tienda Olímpica y la acusaron de robo frente a otros clientes y empleados, lo que para ella fue humillante y desgarrador, pese a que recibió buen trato por parte de los agentes.
El hecho ocurrió este domingo 16 de junio del 2024, y le marcó la vida a Cáterin Paola Contreras Daza, a tal punto que desde el momento que recobró su libertad se encerró en su vivienda y el celular lo colocó en silencio y en modo avión.
El contexto cuando fue conocido por la fiscal tercera local en turno URI, se abstuvo de llevar ese caso a audiencia porque no se configuró ningún delito y le correspondía darle legalidad a la audiencia el juzgado segundo municipal de Fonseca, en cabeza del juez Dany José Redondo Ceballos.
Contreras Daza, es madre de tres hijas; es una emprendedora oriunda el corregimiento de Cañaverales, en San Juan del Cesar. pero reside en el corregimiento de Conejo, municipio de Fonseca.
“No sé en qué momento se filtró esa información. Me tomaron fotos, eso fue en un instante en que yo estaba en un momento de pánico. Yo no sé cómo sucedió, en qué momento, porque eso fue tan rápido que sucedió que no sé qué pasó”.
Tanto en el corregimiento donde vive como en donde labora tiene el emprendimiento denominado Delicias K, sitio bastante concurrido porque como ella dice, a todo le pone amor y mucha disciplina.
“Yo soy madre comunitaria en corregimiento de Cañaverales, soy Trabajadora Social, una mujer echada para adelante, tengo un emprendimiento en mi casa, un negocio de comida rápida, yo madre de tres niñas y tengo mi hogar formado”, dijo entre lágrimas la adulta joven Caterin Paola.
Es evidente, que la situación vivida por subraya la importancia de la precisión y la sensibilidad en las comunicaciones policiales, así como la necesidad de proteger la reputación y el bienestar emocional de las personas involucradas en situaciones delicadas como esta.
Contreras Daza fue dejada en libertad la tarde de este domingo. Dijo que su familia estudia la posibilidad de colocar esta situación en manos de un abogado para que a través de un proceso penal se le devuelva su buen nombre.