El pasado miércoles el CD citó a un debate de control político, en la Cámara de Representantes, acerca de los falsos testigos. Tuve la oportunidad de presentar el caso de los testimonios falsos en contra del presidente Uribe.
Empecé pidiéndole al ciudadano que considerara, por un momento, la posibilidad de que del presidente Uribe fuera inocente. Pareciera que en esta carrera de querer “demostrar” su culpabilidad, los enemigos políticos no se dan ni un segundo para aceptar la presunción de inocencia. Como lo consideran culpable compran todos los cuentos por estrafalarios que sean de delincuentes presos en las cárceles, que ganan con cada mentira.
¿Por qué el presidente Uribe, que logró desmovilizar los grupos paramilitares y extraditar a los jefes que siguieron delinquiendo, es acusado de ser paramilitar?
Las cifras de Justicia y Paz hablan de más de 380.000 víctimas reconocidas, 35.000 paramilitares desmovilizados, 4.000 procesados, cerca de 2.000 imputados y 1000 por imputar. Sumado a los 14 jefes paramilitares que fueron extraditados, por seguir delinquiendo después de la negociación, desde la cárcel. Todos los jefes paramilitares pagaron cárcel, todos. El resultado más significativo fue la reducción de la tasa de homicidio en un 45%.
Es de esperar que muchos jefes paramilitares tuvieran resentimiento contra el presidente que los persiguió y encarceló.
Desde el 2011 el Senador Cepeda visitó las cárceles del país. No hay claridad de la cantidad de las visitas ni de cuántos presos entrevistó. Ni siquiera quienes. Se estima fueron más de 100. A muchas de estas visitas iba acompañado de la fundación “Comité de solidaridad con los presos políticos”, que ofrecía colaboración a los reclusos, ayudas jurídicas, económicas y familias reubicarlas en el exterior.
El Senador Cepeda solicitó 21 visitas a Juan Guillermo Monsalve, pero dice haberlo visto, efectivamente, 9 veces. En una de las visitas en el 2011, Monsalve afirmó que siendo escolta del fallecido Luis Villegas, y que asistió a reuniones en las que se planeó la conformación del bloque Metro, en las que participaron -según él- los hermanos Uribe. Señala como autor intelectual de la masacre de San Roque a Uribe.
Después de las declaraciones Monsalve empieza a recibir beneficios. Es trasladado de cárcel y con mejores condiciones, dice otro recluso que tuvo una celda especial. Actualmente su esposa se encuentra en Canadá.
No hay pruebas de que Monsalve haya sido paramilitar. No estuvo en Justicia y Paz, los hechos por los que fue condenado, secuestro y concierto para delinquir, ocurrieron con posterioridad a la vigencia de la ley.
Paramilitares de probada pertenencia al bloque Metro, han dado declaraciones en las que afirman que Uribe nada tenía que ver y sobretodo han negado la participación de Monsalve en ese bloque.
En sus propias declaraciones posteriores Monsalve dice que no conoce personalmente a Uribe ni los laboratorios o planes de los que hablaba Monsalve en la Hacienda. Su padre, Oscar Monsalve, en una declaración del 2013 lo contradice.
Otras declaraciones como las de “mono leche” afirman que, en las cárceles de Colombia, ha habido ofrecimientos de prebendas a exjefes de las autodefensas para que declaren en contra de los hermanos Uribe.
Hubo también varios intentos de contactos a gente cercana del Uribismo por parte de Monsalve. A través del preso Pardo, de Vicky Jaramillo y la flagrante trampa al representante Álvaro Hernán Prada.
Temas que serán ampliados en la siguiente columna. Se trata de un elaborado plan criminal contra el presidente Uribe que se espera sea aclarado con plenas garantías judiciales.