Se estrenó esta semana un nuevo capítulo de la novela, La corrupción de Odebrecht, “Los Bulldozer”, protagonizado por 6 senadores y varios representantes, un elenco en el que el Cesar tiene un ilustre personaje, Ape Cuello, a pesar de que negó hasta la saciedad tener algo que ver, su situación se complica y bastante, con la compulsa de copias por parte de la Fiscalía a la Corte se le cae su campaña. Un informe que reveló noticias UNO, demuestra que sí era congresista en ese momento y además, agradece la aprobación del Conpes de la adición Ocaña-Gamarra, también es evidente una estrecha relación con el ventilador de todo el proceso, Juan Sebastián Correa, asesor de la ANI, quien gestó todo este entramado con los brasileros y el director, Luis Fernando Andrade. Esto apenas comienza, porque se siguen echando el agua sucia unos a otros, lo que confesó el Bulldozer mayor, Armando Benedetti, es sumamente grave y debe analizarse con mucho detenimiento ¿Cómo así que el Fiscal General estuvo en Montería durante 3 días repartiendo dinero a trocha y mocha para la segunda vuelta cuando perdieron con Zuluaga? ¿Por qué cayeron Musa, Ñoño, Otto Bula, que recibieron el dinero y a los que lo entregaron, como a Roberto Prieto, no les pasa nada? ¿Cuál fue el documento ultra secreto que recibió el presidente Santos de Roberto Prieto? ¿Se acaba de enterar o fue a sus espaldas? ¿Será que hay también en todo esto una retroexcavadora llamada Germán Vargas Lleras y que además se tiene tomada la fiscalía, como han denunciado Claudia López, Robledo, Petro y ahora Benedetti?
Se avecina una campaña de miedo, mucho más dura y difícil que la del 2014, con ataques, calumnias e infamias de una clase política que cada día se degrada más, mientras el pueblo colombiano sufre las peores necesidades en educación, empleo y salud, solo por mencionar algunos temas. Estamos cansados de tanta corrupción, los que han estado en el poder en los últimos 40 años solo han vivido de escándalo en escándalo y no hay renovación a la vista: Gaviria y Samper, peleándose el Partido Liberal; Andrade, uno de los bulldozer, liderando a los conservadores; Benedetti, otro bulldozer, en la U que está a punto de desaparecer; en el Centro Democrático, acaban de desafectar a Oscar Iván Zuluaga y a Luis Alfredo Ramos por lo mismo, corrupción; si a esto le sumamos que la justicia está tomada por el cartel de la Toga y el hombre más cercano al presidente, Alfonso Prada, es acusado de corrupción en el Sena, apague y vámonos. El sistema de los Bulldozer se tomó a Colombia, prueba cómo se hace la política y porqué se mueven ríos de dinero en cada elección por parte de mafias que se han encargado de comprar alcaldías, gobernaciones y congresistas para que los beneficien con contratos multimillonarios. Para elegirse hay que hacer pactos corruptos y cuando los destituyen, tienen preparada la terna, como ocurrió recientemente con Manolo Duque en Cartagena. ¿A dónde vamos a llegar? Nadie sabe, porque si no hay garantías y si la Fiscalía sigue obrando con resultados para un jefe político, esto no va a terminar bien, justo cuando se hablaba de paz y reconciliación, con un país polarizado al extremo y unas instituciones cada vez más débiles. @JACOBOSOLANOC