Los administradores en general de las EPS no quieren entender que al solucionar los numerosos problemas se beneficiarían principalmente las empresas prestadoras de servicios de salud; es seguro que con una óptima atención médica preventiva se disminuirían las novedades por urgencias y hasta la muerte de pacientes.
Esto es insólito. Resulta supremamente claro y hasta elemental que si a un paciente un médico general o especialista le formula algún medicamento no deben existir talanqueras y, en consecuencia, debe ser entregado en forma inmediata.
Es que definitivamente el sistema de salud en Colombia está cada día peor y ahora las EPS decidieron crear la indicada traba. El rosario de problemas, después de años de padecimientos, lo encabeza el hacinamiento que se presenta principamente en los servicios de urgencias y es debido al alto número de afiliados; también las limitaciones y trabas en la entrega de medicamentos; igualmente el proceso de las autorizaciones para todo y las demoras en la asignación de las citas con médicos generales o especialistas.
Como consecuencia de las anteriores situaciones, el paciente pierde mucho tiempo y corre con el peligro de que se agrave por el evento de salud y hasta muera.Ni más faltaba, hay que mencionar los pésimos salarios al personal médico y las deudas de las EPS con los hospitales del país.
Con motivo de los insistentes problemas y las trabas en las EPS, actualmente no hay ninguna duda que la mayoría de trabajadores, pensionados y pacientes en general somos los que padecemos por las ineficiencias en los servicios que se presentan.
En verdad que no hay derecho para estas caóticas situaciones y más aún que miles de pacientes, para lograr muchos servicios y hasta la entrega de medicamentos, tengan que hacer uso del derecho de petición y hasta la tutela, que están consagrados en la Constitución Política de Colombia, artículos 23 y 86, respectivamente.