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Mar, Nov

Sergio Diaz-Granados en la lista de los 100 líderes ambientales

Internacional
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El reconocido abogado y líder político samario, Presidente Ejecutivo del Banco de Desarrollo para América Latina y el Caribe, fue destacado por la revista estadounidense TIME100 Climate 2025, por su incansable lucha contra el cambio climático.

Sergio Díaz-Granados, Presidente Ejecutivo del Banco de Desarrollo para América Latina y el Caribe (CAF), fue incluido en el listado de las 100 personalidades más influyentes en la acción climática mundial, publicado por la revista estadounidense TIME100 Climate 2025.

Con este reconocimiento se destaca a lídere científicos, políticos, figuras culturales y grandes empresas tecnológicas, entre otras.

 

Por la lucha

contra el cambio climático

En dicha publicación, el rotativo detalló que el objetivo principal para la escogencia era enfatizar en las personalidades que muestran su inmenso interés en la lucha contra el cambio climática. 

Según el TIME100 Climate 2025, Díaz-Granados, lidera el financiamiento de infraestructura sostenible y adaptación en América Latina.

De lista también hacen parte, el rey Carlos III del Reino Unido, quien utiliza su posición para promover la conservación de la biodiversidad; Luiz Inácio Lula da Silva, Presidente, Brasil, quien destaca la protección de la Amazonía y el combate a la deforestación como ejes de su gestión; Jennifer Geerlings-Simons, Presidenta de República de Surinam, quien defiende los bosques de su país, posicionando al país como carbono negativo, y Gavin Newsom, Gobernador de California, por liderar políticas progresistas, incluyendo la prohibición de venta de autos nuevos a gasolina.

En la referencia que hace dicha revista, señala que, Sergio Díaz-Granados, causó sensación el año pasado al ayudar a El Salvador a negociar el mayor canje de deuda por conservación ambiental. El objetivo es reducir la deuda del país a cambio de compromisos ambientales.

El acuerdo, valorado en mil millones de dólares y financiado por JPMorgan Chase, destinará 350 millones a la conservación del río Lempa, que abastece de agua potable al 68% del país y es la principal fuente de energía hidroeléctrica. Este acuerdo sirve de modelo para otros países que buscan reducir su deuda y reforzar sus compromisos ambientales.

Además, en junio, CAF aprobó una financiación récord de 5.200 millones de dólares para promover el desarrollo sostenible. Esta iniciativa apoyará 16 proyectos en 10 países en áreas como infraestructura, acción climática, desarrollo humano, movilidad urbana y transición energética; se trata de la mayor ronda de aprobaciones de crédito de la agencia hasta la fecha.

En entrevista con el medio de comunicación, el magdalenense se refirió a varios temas, entre los que se destacan las proyecciones para el 2027 para hacerle frente al cambio climático.

 

¿Cuál es, en su opinión, la acción más importante que el público, una empresa o gobierno en particular, debe emprender el próximo año para impulsar la agenda climática?

“Debemos reconocer a América Latina y el Caribe desde una perspectiva ecosistémica. La naturaleza no entiende de fronteras políticas. Por lo tanto, la coordinación entre gobiernos es fundamental para preservar la riqueza y la biodiversidad de nuestros ecosistemas. Este reconocimiento debería traducirse en mayor financiación para el clima en nuestra región, así como en nuevos proyectos que promuevan la sostenibilidad, incluyendo la transición energética y el fomento de la biodiversidad. La región cuenta con las reservas de biodiversidad más importantes del mundo y somos líderes en matrices de energía renovable. Por consiguiente, proteger y potenciar estos recursos es la manera más rentable y eficiente de garantizar la estabilidad ambiental del planeta”.

 

¿Qué solución climática no recibe la atención ni la financiación que merece?

“Una solución climática que permanece relativamente oculta es la verdadera valoración económica de la biodiversidad como un activo fundamental para la resiliencia y la innovación. Se trata de conservar, pero también de aprovechar de forma sostenible este capital natural para generar nuevos modelos de negocio, bioeconomía y biotecnología. La biodiversidad es la base para la adaptación al cambio climático, la seguridad alimentaria y el desarrollo de medicamentos del futuro. Y a pesar de estas evidencias, la inversión financiera es insignificante en comparación con su valor. Debemos dejar de ver la biodiversidad como una carga y empezar a verla como el laboratorio viviente y el pilar de estabilidad que realmente es. Esto requiere inversión en ciencia, tecnología y cadenas de valor sostenibles que beneficien a las comunidades locales”.

 

Si pudiera dirigirse a los líderes mundiales en la próxima COP, ¿qué les diría?

“Primero, les diría que es necesario lograr un mayor consenso en torno a las COP. Es fundamental generar una visión integral que contribuya a promover una conciencia holística. La realidad es que la mayor crisis actual es la pérdida de biodiversidad. Cada vez que se pierde una especie, se pierde un milagro de la naturaleza. Segundo, les diría que América Latina y el Caribe son una región de soluciones. Somos la región verde, la región de energía limpia y la región de mega-biodiversidad. Pero no podemos asumir solos el costo de proteger estos bienes públicos globales. Necesitamos un nuevo consenso internacional donde la financiación para el clima y el medio ambiente sea predecible, accesible y proporcional al desafío. Finalmente, enfatizaría la necesidad de trabajar con las comunidades que están en la primera línea de la crisis climática y con quienes defienden y protegen nuestros recursos naturales. Lamentablemente, esta región comprende muchas islas cuya existencia misma se ve amenazada por el aumento del nivel del mar y fenómenos climáticos extremos como huracanes e inundaciones. Es también una región donde los líderes ambientalistas corren mayor riesgo. Su seguridad y bienestar deben estar garantizados”.