Luis Gilberto Murillo, el canciller colombiano, aseguró este miércoles que la reunión que anunció desde el lunes entre los presidentes de Colombia, Brasil y México con Nicolás Maduro está "planteada" y llegó a estar confirmada, pero que esperan una "reconfirmación" para que se materialice.
"Oficialmente está planteada, esperemos que se materialice", señaló Murillo en declaraciones a los medios, quien explicó que el mandatario colombiano Gustavo Petro convocó la reunión con sus homólogos mexicano y brasileño, Andrés Manuel López Obrador y Luiz Inácio Lula da Silva, que se llegó a confirmar pero ahora están pendientes de que "se reconfirme".
El día martes, Murillo comentó que la reunión entre los tres presidentes del que denominó "G3" podría tener lugar hoy, pero aún no se ha dado. "Esa reunión se confirmó pero falta la confirmación de López Obrador, que está en proceso de empalme", explicó el canciller colombiano.
Así mismo, puso en duda las intenciones de Maduro de asistir, luego de que Colombia y Brasil emitieran el martes un comunicado conjunto en el que expresaban su preocupación por la orden de detención emitida por la Justicia de Venezuela contra el abanderado de la mayoría opositora -la Plataforma Unitaria Democrática (PUD)-, Edmundo González Urrutia.
"Nosotros hemos manifestado nuestra posición en relación con lo sucedido con Edmundo González y esto siempre en diplomacia estas acciones tienen reacciones, entonces veremos que se materialice esa reunión", recalcó Murillo.
Por otro lado, Petro y Lula han intentado mediar en la crisis que Venezuela tiene abierta desde que el ente electoral anunció la cuestionada victoria de Maduro en las votaciones del pasado 28 de julio.
El 22 de agosto el Tribunal Supremo avaló el resultado del Consejo Nacional Electoral (CNE) que dio por ganador al presidente Maduro, una victoria que la oposición liderada por González Urrutia y María Corina Machado niegan reconocer y múltiples países latinoamericanos también han cuestionado.
Edmundo González Urrutia, insiste en pedir que se publiquen las actas electorales y a abrir sendas de diálogo con las dos partes. Aunque, ninguno de los dos países ha reconocido aún la victoria de Maduro, tampoco se han decantado por el abanderado de la oposición mayoritaria.