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Sáb, Nov

Asedio a la ganadería de carne

Columnas de Opinión
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Escrito por:

Miguel Lacouture Arevalo

Miguel Lacouture Arevalo

Columna: Opinión

e-mail: clearyclear@gmail.com

El respeto que merece la empresa ganadera colombiana por sus aporte al PIB, exportaciones, la inmensa participación de pequeños ganaderos, generación de empleos directos e indirectos y  Seguridad Alimentaria de la Nación es amplísimo, ser ganadero en Colombia para no pocos miembros de la sociedad es sinónimo de emprendimiento y empoderamiento económico.


La ganadería en Colombia es la empresa legal y legítima más grande del sector rural, siempre ha sido asediada por la inseguridad social y jurídica, abigeato,  guerrillas y paramilitares, veganos, ambientalistas y animalistas que han encontrado una fuente inagotable de "supuestos argumentos" para  atacar permanentemente; no contábamos con  “Fuego Amigo”, de uno de los eslabones de la cadena cárnica, (Frigoríficos) y algunos opinadores del sector que se oponen abiertamente a la exportación de ganados en pie so pretexto  de que el hato ganadero está viéndose afectado con escasez para el consumo nacional originando mayores costo de la carne de res al detal, cómo argumento para lograr la regulación de las exportaciones de reses vivas por la institucionalidad gubernamental, otros lanzan sus ataques soportados en que es más rentable exportar carnes con valores agregados o transformados.

El Hato ganadero en Colombia al cierre del 2021 fue de 29.527.270 individuos con una tasa de extracción de 14.4%, 4.251.969 bovinos, de estos salieron en pie al mercado internacional 247.171 reses, el  5.81% de la tasa de extracción va al mercado global por un costo total de Us $ 151.7 M,  equivalentes a $ 591.630 M con participación del 35.4% en los Us $ 427.3 del total de exportaciones ganaderas del 2021., todo lo anterior hace caer la argumentación de los frigoríficos quienes han visto disminuido sus  rentabilidades dado que el  precio del ganado en pie para el consumo interno no es ya impuesto por la industria cárnica nacional, hoy dada la dinámica del mercadeo de nuestras carnes sostenibles y ganados machos enteros levantados a P.A.S, (Pastos, Agua y Sal), sin anabólicos, están siendo regulados por mercados globales que aumenta la demanda día a día. 

No es cierto que el hato ganadero se esté afectando, las cifras demuestran lo contrario máxime si tenemos en cuenta  que en Colombia hay 19.3 Millones de hembras, de estas el 60% en edades reproductivas 11.580.000, con tasa de Natalidad del 50%, arroja 5.790.000 nacimientos año, que absorben suficientemente la tasa de extracción del 14.4%, lo que deben hacer los frigoríficos es reinventar la industria, disminuir márgenes de intermediación para llegar al consumidor a precio accesibles y no pretender que el excedente exportable quede en el país para provocar sobreoferta al mercado interno haciendo caer abruptamente el precio del ganado en pie a los niveles de antes que hacen insostenible la empresa ganadera.

El tema de Seguridad Alimentaria está fuera del alcance del ganadero que se ha esforzado durante años por hacer su empresa rentable, obviamente el ideal es despachar carnes con valores agregados, ¿qué hacer entonces con estos excedentes demandados por el mercado global?, La ganadería en Colombia es autosuficiente para cubrir los tres frentes de demandas, Mercado Interno, carnes empacadas  y reses vivas al mercado global, hay que buscar alternativas para disminuir costos interno, claro que sí, pedagogía de cambio de hábitos de consumo de carne de res de piezas a molida en diferentes presentaciones, albóndigas, hamburguesas, etc., como proponen, está es una labor a mediano y largo plazo, no es con cierre de exportaciones en pie a costas del bienestar y crecimiento de la más grande empresa rural de Colombia, es obvio que si queremos seguir creciendo para cubrir las demandas urge mejoramiento genético de la mano con una política de "repoblamiento bovino mejorado enfocado en carne" así como retomar los Fondos Ganaderos instrumento ideal para una mayor y equitativa redistribución del hato colombiano e inclusión financiera.