A pesar de que el ultraderechista José Antonio Kast se impuso en las elecciones del pasado domingo en Chile, el resultado no ha sido un fuerte mensaje claro para quienes ostentan el poder, luego que el resultado arrojó apenas un 28% a favor de Kast y un 25, 67% a favor de su inmediato seguidor Gabriel Boric, una diferencia que no se no supera el 3% de los sufragios.
Aunque aún no se ha ganado en la totalidad, todavía viven las esperanzas que el 19 de diciembre cuando se realice la segunda vuelta, se pueda superar los comicios del pasado domingo.
El Servicio Electoral de Chile informó que solo participaron en las elecciones del domingo el 47,195%, es decir que aún quedan por votar casi el 53% de los votantes, cuyo volumen alcanza a superar los quince millones de sufragios, mientras que el pasado domingo no alcanzaron a los siete millones.
Ahora solo toca esperar el 19 de diciembre, donde deben enfrentarse los dos que sumaron mayor número votos, los cuales deben acudir al auxilio de los minoritarios para poder escalar en la conquista del poder,
Kast, puede conquistar a la democracia cristiana Yasna Provoste y al derechista Sebastian Sichel quienes no alcanzaron el 25% del total de los sufragios, pero teniendo la misma ideología política del ganador de la primera vuelta, pueden conquistar parte del poder.
En cuanto a Venezuela, ya era sabido el triunfo del chavismo que, al conquistar 20 gobernaciones de 23 en total, se nota un contundente triunfo. La oposición venezolana a duras penas pudo conquistar el 13% del total de los sufragios, mientras que el chavismo se quedó con el 87%. Sin embargo, el chavismo perdió 1.9 millones de sufragantes si se compara con los resultados del debate de hace cuatro años. El chavismo ganó en cuanto al número de cargos en su control, pero las cifras también arrojan detalles que permiten explicar la evolución de los cuadros políticos. No queda ninguna duda el Partido Socialista Unidos de Venezuela (PSUV) se adjudicó el triunfo, pero también cabe aclarar que en el primer boletín del C.N.E obtuvo 3,7 millones de votos, cuando en las elecciones regionales de hace cuatro años (2017) habían obtenido 5, 6 millones de votante, además solo fueron a las urnas el 40% de los electores, lo que indica que el chavismo es mayoría, dentro de las minorías.
Debido a que la oposición venezolana aún no hay unidad de criterio, se lanzaron al debate de manera dispersa, sin embargo, lograron 117 alcaldía de 335, Juan Guaidó ganó 59 la alianza democrática 37 otros grupos opositores a Maduro, lograron 21, hace cuatro años la oposición logró 26 alcaldías mientras que el chavismo había ganado 298.
A pesar de que oposición se fue coaligada al debate logró un gran avance, si hubiese llegado unificado al debate, según los resultados, estaría sacando 14 gobernaciones, es decir que el partido de Maduro solo se hubiese quedado con nueve gobernaciones.
Después de unos días de haberse efectuado las elecciones, aún no se ha podido establecer quién es el gobernador del Estado de Barinas. El opositor Freddy Superlano se encuentra superando a Argenis Chávez, hermano del finado presidente Hugo Chávez.
El estado de Barinas es prácticamente la cuna del chavismo, pues allí nació Hugo Chávez el creador del (PSUV) partido que lleva más de dos décadas en el poder. Si Superlano, llegase a triunfar, la oposición ganaría un escaño en las gobernaciones y los antagonistas de Maduro tuvieron una derrota decorosa que en las elecciones presidenciales se puede convertir en un triunfo digno y respetable si llegan a convencer al 60% que fueron a las urnas.