No podemos separar el nombre de Richard Burton del de Elizabeth Taylor. La diva del cine, con sus ojos color violeta, antes de firmar sus millonarios contratos por cada película exigía que Burton estuviera con ella como coprotagonista.
Richard Francis Burton nació en Torquay, Gran Bretaña, el 19 de marzo de 1821. Su espíritu aventurero lo lanzó desde temprano a realizar empresas temerarias. Era lingüista, poeta, escritor, traductor, filólogo, fue cónsul, orientalista y espadachín destacado. Se dice que hablaba veintinueve lenguas, pues se dedicaba a estudiarlas en cada territorio que visitaba; además, se familiarizaba con sus costumbres. Su vasto conocimiento le permitió establecer puentes entre pueblos de culturas diferentes. Fue cónsul en Damasco y Trieste. Su temperamento irreverente ante las autoridades británicas le causó muchas enemistades en la sociedad victoriana. Se sentía extranjero en todas partes.
A los veintiún años sirvió en el ejército británico en la India, donde pasó siete años aprendiendo su cultura. Esto le dio autoridad para criticar la irresponsabilidad con la cual el imperio británico trataba a los habitantes de esa región. En su viaje a la península de Arabia permaneció en Alejandría, donde practicó medicina básica. Burton fue el primer occidental en entrar y salir vivo de la ciudad sagrada de Harar, en Somalia. Para conocer la Meca viajó solo, disfrazado de árabe; plasmó esa odisea en su libro ‘Mi peregrinación a la Meca y Medina’. Tradujo al inglés, en forma integral, ‘Las mil y una noches’; también ‘Kama Sutra’ y la novela ‘Os Lusiadas’ del portugués Luis de Camões. Descubrió el lago de Tangañica, en África. Con John Hanning Speke formó una pareja importante en el mundo de la exploración. Se dedicaron a encontrar las fuentes del río Nilo. Richard Francis Burton murió el 20 de octubre de 1890.
Aunque resulta interesante la vida del explorador británico, estamos más familiarizados con el actor que unió su vida a Elizabeth Taylor durante diez años (1964 – 1974). Este Richard Burton nació en Gales, Inglaterra, el 10 de noviembre de 1925 y murió en Ginebra, Suiza, el 5 de agosto de 1984. Su nombre original era Richard Walter Jenkins pero cambió su apellido para rendirle homenaje a su profesor de literatura, Philip Burton, quien lo ayudó en su adolescencia, sobre todo para que cambiara su acento galés. En el teatro siempre brilló. La crítica lo consideraba el sucesor de Laurence Olivier; sin embargo, su iniciación en el cine no fue exitosa, aunque más tarde le coqueteó al premio Oscar varias veces. Su debut en Hollywood fue con la película ‘Mi prima Raquel’, en 1952. Burton fue actor de cine en ‘Las ratas del desierto’ (1953), ‘El manto sagrado’ (1953), ‘Alejandro el Grande’ (1956), ‘Mirando hacia atrás con ira’ (1958), ‘El día más largo’ (1962), ‘Cleopatra’ (1963), ‘Becket’ (1964), ‘La noche de la iguana’ (1964), ‘El espía que regresó del frío’ (1965), ‘¿Quién le teme a Virginia Woolf?’ (1966), ‘La mujer indomable’ (1967) y muchas películas más. En teatro se recuerdan ‘La tempestad’, ‘Hamlet’, ‘Enrique V’, ‘Otelo’, ‘Camelot’, ‘Doctor Fausto’... En toda su carrera en el cine sumó siete nominaciones al Oscar pero nunca ganó ese premio.
Richard Burton se casó con la actriz Sybil Williams en 1949 y tuvo con ella dos hijas. Durante la filmación de ‘Cleopatra’ comenzó el romance entre Burton y Elizabeth Taylor. Se casaron en 1964, se divorciaron diez años después para casarse nuevamente en 1975 y divorciarse por segunda vez en junio de 1976. Por su interpretación en el musical ‘Camelot’ Richard Burton obtuvo el premio Tony en 1961.