Importa por ser esencial en alto grado, la autonomía que podamos tener como pueblo, en lo que se apuntan los particulares estilos de vida, la conservación de usos, costumbres, valores y principios.para que en la medida que se den los cambios universales en lo tecnológico, industrial y comercial, debamos y tengamos la obligación de estar atentos a incorporarlos; porque aunque parezca de perogrullo, interesa entrar en dichos avances con sello de identidad sin ser avasallados, en busca de reconocimiento, protección, forma de vida y de la mano del derecho natural que nos sobreviene por territorio y recursos naturales, al tiempo de exigir se protejan de igual manera derechos humanos, vulnerabilidades y no seguir soportando más históricas desatenciones.
Estamos exigidos a conservar valores y principios; cuidar nuestros bosques, tierras y aguas; impulsar programas de desarrollo urbano, industrial e incorporarlos en beneficio de todos. Apuntar asertivamente a mejorar las condiciones de vida, educación, empleo. Nunca abandonar tradiciones, usos y costumbres, ni permitir abusos de discriminación y desafíos, como tampoco aceptar seguir viviendo en condiciones de marginación y precariedad al carecer de los servicios más básicos. Requiere todo lo cual, apoyos financieros de envergadura, recurrir si del caso fuere, a la cooperación internacional para la solución de los uno y más problemas que enfrentamos como comunidad en nuestros derechos humanos, medio ambiente, desarrollo social, crecimiento económico, educación y salud; en lo que fundamental ha de ser la vinculación de universidades, academias, entidades públicas y demás fuerzas vivas, para que aporten su ser, hacer y quehacer institucional en la potenciación de los niveles de honorabilidad y dignidad, así como defender y salvaguardar los derechos, con programas de inclusión en lo educacional y desarrollo social que nos permita menos abusos para defendernos, ojalá con éxito de los siempre acometedores procesos de transculturización
Ser autónomo cuenta, mayormente por cuanto moralmente es la capacidad del ser humano de valorar aspectos de carácter moral por sí mismo, por cuanto las personas son capaces de juzgar un modo de actuación o una realidad sin tener en cuenta factores externos que puedan influir en esa valoración. Sin embargo, a nivel real la autonomía moral de las personas se ve fuertemente influenciada por el entorno social, toda vez que se considera la autonomía moral como producto del desarrollo humano y personal y permite a las personas una capacidad de decisión en consecuencia de sus valores morales y de percepción crítica del Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.