Colombia es un país que merece todas las oportunidades, su oración y visita hará que este país recapitule muchas etapas que hoy vivimos y que paso a paso iremos superando. Gracias por visitar un país, que aun polarizado en un tema político, recibe su visita con esperanza e ilusión.
La llegada a Colombia del representante de Dios en la tierra, lo que debe significar es una oportunidad única para los corazones de los colombianos. Mi fe, católica, me lleva a escribir esta carta, para dar al papa Francisco la bienvenida como merece a Colombia. Y cuando digo como merece, me refiero a que esto nada político significa, ni para el gobierno, ni para la oposición y tampoco para grupos armados.
Que se use la llegada de su Santidad Francisco a Colombia en nombre de la Paz me parece que es un hecho fuera de contexto. La visita del Papa tiene contenidos más profundos, tiene un precedente histórico para el país, un propósito que debe unirnos a los colombianos entorno a las reflexiones personales y la creación de vínculos fraternos entre nosotros, muy lejos de crear un solo discurso y mucho menos un solo discurso político, si de discursos y mensajes se trata, la llegada del Papa es un mensaje de cambios personales y de cercanía a Dios.
Nadie puede en absoluto!!! Debe cambiar el propósito principal de esta visita apostólica, que, como dice su nombre oficial, es una visita para cumplir el apostolado del perdón y la misericordia de Dios, contrario a una imposición de propósitos.
De mi parte papa Francisco quiero darle la mayor bienvenida a mi país, un país que sueña en grande, donde caben todas las creencias, donde se cumple ese regalo de Dios de poder vivir en comunidad, donde por más que existan problemas, ninguna vicisitud nos quita esa esperanzadora ilusión de vivir felices con la naturaleza, con el avance tecnológico y sobretodo con un concepto claro de familia y patria, la cual tiene muchas consideraciones individuales, la mía es la que profesa nuestra fe compartida, la Fe de Cristo, la cual despierta en millones Colombianos alegría.
Colombia es un destello de Dios en la tierra, donde avivan los cantos celestiales, las riquezas en sabiduría de Salomón, la iglesia instaurada de Pedro, la fraternidad de José, Jesús y María y el Amor del Padre. Bienvenido su Santidad papa Francisco a Colombia,
Los recibimos con amor y fe.