Un reciente estudio del Instituto Geográfico Agustín Codazzi (Igag) indica que los mejores suelos para cultivar en Colombia están en el Vichada, Meta, Antioquia, Cundinamarca, Santander, Magdalena, Córdoba, Cesar, Bolívar y Sucre. Según el Igag, el área productiva de estos diez departamentos es de 8.4 millones de hectáreas, de las cuales el 42 % se encuentra en los departamentos de la región Caribe.
Con esta valiosa información, la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria (Upra), debería dedicarse desde ya a elaborar los mapas de zonificación agrícola que permitan determinar (de acuerdo con las condiciones agroecológicas, mercados y pronósticos climáticos del Ideam) los cultivos que deben fomentarse en dichos departamentos y los calendarios de siembras. De igual manera, Corpoica debería dedicarse a investigar y producir las variedades de semillas que pueden ser adoptadas por los productores en esas regiones y validar los paquetes tecnológicos que deben utilizarse en cada cultivo. Solo así tendremos una verdadera política de ordenamiento del sector productivo y de manejo del riesgo agropecuario.
Tener un valioso instrumento de zonificación permitió que la superficie agrícola de Brasil pasara de 37 a 55 millones de hectáreas en los últimos 20 años con cultivos de algodón, arroz, frijol, soja, sorgo, trigo, maíz, cacahuates y girasol. La zonificación agrícola de riesgo climático (así se llama en el país carioca) se implementó por primera vez en 1996, para la siembra de trigo y en la actualidad están incluidos 40 cultivos. Desde entonces, los agricultores brasileros han obtenido los mejores rendimientos en maíz (10 ton/ha), soja (3.3 ton/ha) y algodón fibra (1.5 ton/ha), para mencionar unos casos. Los nuestros obtienen el 50 % de esas producciones.
En Brasil los incentivos y ayudas que destina el Ministerio de Agricultura, Pecuario y Abastecimiento (Mapa), se direccionan teniendo en cuenta la zonificación agrícola. Para citar algún ejemplo: cuando el gobierno de Lula tomó la decisión de fomentar los cultivos de algodón y soja, los estudios de zonificación determinaron que las mejores zonas eran las de Mato Grosso, Bahía, Paraná, Río Grande do Sul, Goiás, Minas Gerais y Maranhao. Rápidamente, el Gobierno direccionó grandes inversiones públicas en construcción de distritos de riego, vías y servicios públicos. A los productores se les aprobaron créditos a largos plazos con tasas de interés bajas y un subsidio a la prima del seguro rural. Hoy, Brasil es el segundo exportador de soja en el mundo y el tercero en algodón.
En Colombia existe el mito que refuerza la idea de que nuestras tierras son ideales para todo tipo de cultivos, sembramos en las montañas y criamos ganado en la planicie, aprovechando menos del 5% de las tierras del país.
Ya el Igac dio el primer paso, ahora le corresponde al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, a través de la Upra, elaborar los mapas de Zonificación Agrícola, de tal manera que los productores del campo tengan una herramienta básica de planificación de sus cultivos y calendarios de siembras.
En el tintero: El próximo jueves 7 de abril, El Heraldo reunirá a los principales dirigentes gremiales y empresarios del país en Valledupar para debatir sobre las perspectivas de la agroindustria en la región Caribe. Excelente iniciativa.